Imagen: (c) Miguel Á. RamírezEl pasado 4 de Julio Nueva York estaba de enhorabuena, y no por celebrar el tradicional día de la Independencia, sino porque se reabría al público el mirador situado en la corona de la Estatua de la Libertad. Desde los atentados del 11-S por motivos de seguridad se cerró el interior de la estructura.
Ahora tan sólo 240 personas serán las que podrán acceder diariamente a las intimidades de la "Lady o Liberty" como se le conoce en inglés. Por cierto, que no mira de frente a Manhattan como muchos creen y creíamos hasta que la vimos, mira hacia Francia, ciudad que la regaló en 1886. Para alcanzar el mirador los visitantes tendrán que subir 168 escalones a través de un estrecha escalera en forma de caracol. Tened en cuenta que si el día es muy caluroso el acceso al interior de la estatua queda restringido debido a que está recubierta de cobre y adquiere una temperatura muy superior a la exterior. La cierran cuando supera los 32 grados. Y la verdad es que las condiciones meteorológicas toman parte en la estatua ya que además de la temperatura en días de fuerte viento la corona puede oscilar unos 8 centímetros, poca cosa teniendo en cuenta que la antorcha que se levanta a unos 90 metros del suelo se puede llegar a mover hasta 13 centímetros.
Eso sí, tendremos que darnos prisa para subir hasta la corona ya que dentro de dos años volverán a cerrar la estatua para realizarle una remodelación completa y a largo plazo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario